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El equipamiento del Laboratorio de Propiedades Físicas del APLTA sigue creciendo e incorpora un analizador de flujo de polvo con el que se puede efectuar un análisis de textura en los alimentos poco habitual
El nuevo accesorio ofrece la posibilidad de realizar cálculos poco habituales en España pero ampliamente utilizados en el resto del mundo que permiten realizar controles de calidad de la producción de diferentes lotes o monitorizar la variación de los ingredientes de nuevos proveedores y su influencia en las propiedades de flujo del producto. Asimismo, posibilita estudiar problemas habituales en el manejo de este tipo de productos como pueden ser el apelmazamiento durante el almacenamiento y transporte, o problemas con la descarga de tolvas.
Juan Ventura Trillo, responsable del Laboratorio de Propiedades Físicas del APLTA, ya puede trabajar con un nuevo accesorio y software asociado que nos permite ampliar el abanico de análisis que podemos ofrecer a las industrias alimentarias, concretamente en los ensayos de textura. Se trata de un analizador de flujo de polvo que se une a la numerosa gama de accesorios y sondas que complementan el analizador de texturas TA.XTPlus con el que trabajamos en el laboratorio de propiedades físicas.
Además de determinar parámetros como la dureza, fragilidad, fracturabilidad, adesividad, masticabilidad, gomosidad o elasticidad, ahora podemos calcular la densidad de compactación de un producto en polvo y estudiar su cohesividad o tendencia a formar agregados, además de su compresibilidad.
Este tipo de cálculos, poco habituales en España pero muy utilizados en el resto del mundo, permiten realizar controles de calidad de la producción de diferentes lotes o monitorizar la variación de los ingredientes de nuevos proveedores y su influencia en las propiedades de flujo del producto. Además, posibilita estudiar problemas habituales en el manejo de este tipo de productos como el apelmazamiento durante el almacenamiento y/o transporte, o problemas con la descarga de tolvas o contenedores. En el caso del apelmazamiento y en función de los resultados obtenidos, se pueden implementar soluciones como la incorporación de sistemas de vibración o la reducción de tiempos de reposo del producto.
Por tanto, el analizador de flujo de polvo viene a ampliar los servicios que ofrecemos en la sección de evaporación y secado de productos líquidos porque nos permite proporcionar una información poco habitual pero muy útil en términos prácticos y, sobre todo, económicos.
El funcionamiento del analizador de flujo de polvo se basa en un rotor mecanizado helicoidalmente que puede moverse a través de una columna de polvo de diferentes maneras, en función de la característica que se vaya a medir.
La pala del rotor es tremendamente precisa y un transductor mide la fuerza axial, tiempo y distancia, mientras el software muestra y analiza los datos en tiempo real.
Estos análisis del comportamiento de productos en polvo también son muy utilizados en otras industrias como la farmacéutica, cosmética, cerámica, metalúrtica, detergentes, carbón y fertilizantes, entre otras.
